Pintado hacia 1789, el cuadro representa un lugar de diversión abierto en 1787 en Pont-de-Canteleu (cerca de Lambersart) que fue muy apreciado por la buena sociedad de la ciudad francesa de Lille antes de ser destruido en 1792 para facilitar la defensa de la Ciudadela contra el asalto de los austriacos.
domingo, 29 de diciembre de 2013
Una fiesta en el Coliseo (François-Joseph Watteau)
Pintado hacia 1789, el cuadro representa un lugar de diversión abierto en 1787 en Pont-de-Canteleu (cerca de Lambersart) que fue muy apreciado por la buena sociedad de la ciudad francesa de Lille antes de ser destruido en 1792 para facilitar la defensa de la Ciudadela contra el asalto de los austriacos.
jueves, 26 de diciembre de 2013
Relieve de marfil con representaciones religiosas (Museo del Cincuentenario de Bruselas –Bélgica-)
Un año después
del último post sobre este tema, retomo la espléndida colección de marfiles de
temática religiosa que guarda el Museo del Cincuentenario de Bruselas. En esta
ocasión con una representación de la Natividad, perfecta para estas fechas
navideñas.
viernes, 20 de diciembre de 2013
martes, 17 de diciembre de 2013
viernes, 13 de diciembre de 2013
domingo, 8 de diciembre de 2013
Inmaculada Concepción (Anónimo)
Esta talla de madera policromada, de estilo barroco del siglo XVIII y autor anónimo forma parte actualmente de la exposición permanente del Museo Diocesano de Sigüenza, proveniente de la arruinada iglesia de San Martín de Molina de Aragón. El autor muestra a la Virgen en un estado de arrebato místico mientras se eleva sobre una nube de la que surgen querubines y las puntas de la media luna. Para ello acentúa una serie de elementos como el manto vaporoso que le confiere sensación de movimiento, mientras que el cuerpo se mantiene en actitud de recogimiento, aceptando lo que Dios ha dispuesto para ella que se refleja en un rostro sereno aunque no exento de cierta tristeza, y unas manos que reposan sobre el corazón con ternura, a la vez que recoge entre sus brazos parte del voluminoso manto. Este manto ofrece una cuidada estampación floral, que también se extiende a la túnica, ofreciendo un interesante contraste de formas y colores que dotan de vitalidad a la figura.
Las proporciones de la Virgen no
son acordes con el modelo clásico, como queda reflejado en una cabeza mucho más
pequeña de lo normal y un cuerpo un tanto estilizado, propio del modelo
tradicional del rococó.