Bagües parte en este cuadro de un
lenguaje realista enriquecido por sus investigaciones en el campo de la
pintura. Se trata de una composición monumental de dos parejas bailando la
jota, acompañadas de otras cuatro figuras más, todo sobre el fondo de una vista
panorámica de la ciudad de Zaragoza. El dinamismo se hace evidente en las
piernas, brazos y vuelo de la saya de la muchacha que el pintor resuelve con
marcados planos y líneas yuxtapuestas. Junto a la cartela donde está la firma
aparece una moneda ibérica con la figura del caballo, rescatada por el autor,
ya que según él, los íberos fueron los primeros en plasmar la más antigua
figuración del movimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario