martes, 30 de abril de 2013

San Pablo (Diego Velázquez)




Esta obra es una excelente muestra de la etapa juvenil de Velázquez, influida profundamente por Caravaggio. En ella podemos admirar su dominio del retrato al presentar la imagen de un hombre de carne y hueso captado directamente del natural y envuelto en una amplísima túnica en la que destacan los pliegues casi escultóricos. San Pablo está sentado sobre un escalón que se confunde con el fondo, zona donde se ven las limitaciones de Velázquez al esconder hábilmente las piernas y ocultarlas bajo los pliegues. Tanto el colorido terroso como la iluminación son rasgos comunes de la etapa sevillana del artista, heredados ambos del Tenebrismo. 


domingo, 28 de abril de 2013

Las vacas (Vincent Van Gogh)



Cuando Van Gogh estaba falto de inspiración recurría a su amplia colección de estampas de maestros antiguos para buscar alguna obra que reinterpretar. Surgen así imágenes inspiradas en Millet, Rembrandt, Delacroix, Doré o Jordaens como las vacas de este cuadro donde el artista aporta su admiración hacia la pincelada empastada y violenta y el colorido más brillante que los pardos habituales en el Barroco. De esta manera, Van Gogh une la tradición y la modernidad, obteniendo admirables resultados.

 


sábado, 27 de abril de 2013

El garrote (Eugenio Lucas Velázquez)

El ajusticiado lleva al sambenito, la casaca de los condenados a la hoguera por la Inquisición.  Con las manos juntas sujetando el crucifijo el pintor lo presenta a punto de expirar con el collar de hierro del garrote aprisionándole el cuello. El cuadro es una versión con variantes que Lucas Velázquez hace de un grabado al aguafuerte de Goya.





viernes, 26 de abril de 2013

Paisaje con la caída de Ícaro (Pieter Brueguel el Viejo)



Pintura al óleo atribuida a Brueguel el Viejo, aunque con reservas desde que se examinó en profundidad en 1996; es probable que se trate de una versión de un original de Brueguel que se ha perdido. Se desconocía su existencia hasta que la adquirió el Museo de Bellas Artes de Bélgica en 1912. Es la única obra del pintor con temática mitológica y también el único óleo sobre lienzo, ya que el resto de su producción sobre lienzo son témperas.
En la mitología griega Ícaro consiguió volar con alas hechas de plumas pegadas con cera, pero se acercó tanto al sol en su vuelo que la cera se fundió y cayó al mar donde se ahogó. Sus piernas se pueden ver en el cuadro sobresaliendo del agua junto al barco más grande.


El labrados del arado, el pastor y el pescador aparecen citados en “Las Metamorfosis” de Ovidio, relato en el que se basa el cuadro, aunque la descripción que se hace en el mismo de estos personajes que “están asombrados y creen ver a los dioses aproximándose a través del éter” no parece corresponderse mucho con lo representado por el pintor. W. H. Auden en su poema “Musée des Beaux-Arts” sugiere que la pintura puede mostrar la indiferencia de la humanidad ante el sufrimiento, de tal manera que los hombres (labrador, pastor y pescador) siguen con sus quehaceres habituales antes la muerte de la figura mitológica (Ícaro).


jueves, 25 de abril de 2013

San Buenaventura (Pedro Pablo Rubens)



La doctrina de San Buenaventura, poco apreciada por la escuela franciscana hasta finales del siglo XVI, fue recuperada y puesta en valor por los teólogos de la contrareforma. Las escenas de la vida del Santo son raras en ese momento, debido a su tardía canonización. Al igual que el cuadro anterior de San Francisco, éste también se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Lille.