lunes, 27 de enero de 2020

Nuestra Señora de la Asunción (Gregorio Pardo, Damián Forment)


En el Museo Arqueológico Nacional se expone esta talla de alabastro policromada procedente del Convento de Santo Domingo el Real de Madrid que representa a Nuestra Señora de la Asunción. La Virgen, elevada por cuatro ángeles en su Asunción a los cielos y coronada por otros dos, se sostiene sobre una media luna y un querubín; el movimiento de ascenso queda reflejado en el contraposto de las figuras y en el plegado revuelto de los paños. Fue realizada entre 1539 y 1541 por Gregorio Vigarny o Pardo, bajo la supervisión de su padre Felipe Vigarny y del escultor aragonés Damián Forment, según consta en el contrato de la obra encargada por don Alonso de Castilla, obispo de Calahorra para su capilla funeraria en el citado convento. Por deseo expreso del comitente, la talla se colocó en la portada del convento, no en su capilla funeraria. Fue descrita como "Virgen de coral porque el ornato es pintado de ello y de oro", en referencia al pigmento rojo que aún cubre los labios de las figuras y el dorado que estuvo aplicado sobre los cabellos, las alas de los ángeles y las vestiduras de la Virgen, todavía parcialmente conservado, si bien muy retocado. Otros pigmentos utilizados en su policromía original fueron el de color negro pintado sobre las pupilas y otro de color azul, aplicado sobre la base, actualmente muy oscuro al haberse degradado. La iconografía combina dos creencias de la tradición católica muy populares en la Edad Moderna que pese a su fondo teológico no fueron constituidas en dogma de fe hasta los siglos XIX y XX: la Inmaculada Concepción de la Virgen y la ascensión de su cuerpo y su alma al cielo tras su muerte y su resurrección. (texto basado en la descripción de la obra que figura en el catálogo online del Museo Arqueológico Nacional)


martes, 21 de enero de 2020

La Débâcle (Claude Monet)


El invierno de 1879-1880 fue extraordinariamente duro en la región de París. Durante noviembre y diciembre de 1879, tras una racha de fuertes nevadas y temperaturas extremadamente bajas, el Sena se hiela. A principios de enero del año siguiente, al aumentar la temperatura se produce una gran inundación en la ciudad que Monet recoge en este cuadro, donde plasma árboles caídos, restos de hielo, tierras inundadas … La composición final se rige por un juego de líneas diagonales y horizontales que siguen el movimiento de las aguas del río. El trazo es amplio y grueso en la parte inferior; sin embargo, la textura del cielo es mucho mas fluida. Conjugando estas dos técnicas con una serie de delicados reflejos teñidos de rosa, el artista consigue romper la monotonía del paisaje.

martes, 14 de enero de 2020

Céfalo y Procis ante Diana (Luca Giordano)


En esta obra mitológica Giordano representa los desdichados amores del ateniense Céfalo casado con la bella Procis y de como la diosa Diana, enamorada del joven, pone en peligro la felicidad de la pareja. Destaca en la obra los grandilocuentes gestos de los personajes, el fuerte plegado de los paños, las musculaturas que imprimen volumen y corporeidad, así como la monumentalidad de la arquitectura, todo ello característico de la manera de trabajar de este pintor barroco. (texto extraído de la cartela que hay junto al cuadro en el Museo de Zaragoza)


martes, 7 de enero de 2020

Retrato de Consuelo Gaztambide Aguader (Ricardo de Madrazo)


La joven, hija del gran compositor navarro Joaquín Gaztambide, aparece retratada de busto sobre fondo neutro inscrita en un amplio óvalo. Peinada con moño alto adornado con flores y vestida con un curioso corpiño con cintas rojas, a juego con un collar de vueltas y pendientes de coral, parece representar unos veinte años. El foco del retrato se concentra en los rasgos de su rostro: labios carnosos y grandes ojos de mirada intensa y un tanto melancólica que dirige al espectador. (texto basado en el catálogo online del Museo Lázara Galdiano, a cuya colección pertenece el cuadro)